septiembre 30, 2023
cuna de madera para nino jesus

Cuna de madera para nino jesus

Cuna o pesebre para el niño Jesús realizado en madera de forma tradicional. A la venta en diferentes tamaños dependiendo del tamaño de la figura del Niño Jesús que se quiera poner en él. Las medidas del Niño Jesús que puede conseguir en nuestros belenes son las siguientes: 6 cm, 8 cm, 10 cm, 12 cm, 15 cm, 20 cm, 25 cm, 30 cm, 35 cm, 40 cm, 45 cm y 50 cm, Las medidas corresponden al tamaño de la imagen del Niño Jesús que va en su interior.

No corresponde a la medida de la cuna. Si tienes un niño Jesús de 20 cm, coloca una marca en la pestaña de medidas del número de 20 cm y realiza la compra. Como hemos dicho en el párrafo anterior, lo indicado en el desplegable de la cuna corresponde a los centímetros que tiene la imagen del Niño Jesús.

Por este motivo es muy importante que tengamos claro cómo mide nuestra figura del Niño Jesús. En caso de duda podemos medir nuestra figura del Niño Jesús, para saber que cuna es la más adecuada. Para medir la imagen lo único que tenemos que tener en cuenta es la longitud.

Es decir, cuántos centímetros mide la figura del Niño Jesús, desde la cabeza hasta los pies. La distancia debe medirse desde la espalda del Niño Jesús, ya que esta parte será la que se apoye en la cuna, y, por tanto, nos permitirá obtener una medida más exacta. Hermosa estatua de yeso del Niño Jesús en su cuna, con los brazos abiertos.Su pesebre es de madera.

Tamaño del bebé: 24 cm.Tamaño del pesebre: 30 x 19 cm. Código del producto: 062-14-XBC20 Cuna del Niño Jesús. Pieza para colocar en el Belén o para decorar la casa en Navidad.

Esta pieza mide unos 21 cm. La cuna de madera mide unos 27 cm de largo y 18 cm de ancho. El Niño Jesús está fechado en los años 50.

Está hecho de escayola con bonitos ojos de cristal. Está compuesto por dos piezas que encajan perfectamente, formando un conjunto homogéneo. Nos referimos al propio Niño Jesús y a la cuna o cama celestial.

El conjunto está representado a tamaño natural, lo que ayuda al realismo de la escena. El Niño Jesús es de tamaño completo, es decir, de bulto redondo y acabado en todas sus partes, por lo que la anatomía infantil del recién nacido está correctamente desarrollada para ser contemplada desde todos los puntos de vista, a pesar de que como se ha indicado antes, el Niño Jesús forma un solo grupo junto con la cuna, donde descansa tiernamente. Esto se debe también en parte a la función final que tendrá esta obra, que aunque a lo largo del año estará expuesta en una vitrina de la parroquia de la Encarnación de Marbella, durante los días de Navidad el párroco de la misma la llevará para darla a besar a los fieles.

El ciclo de trabajo comienza con la realización del modelo. Es realizada por expertos escultores que dan vida, gracias a su imaginación, a figuras de diversos tamaños utilizando cera y modelando a mano. Cada pieza es una pequeña obra de arte que expresa el traje y los colores clásicos del mundo del belén y del arte renacentista.

Posteriormente, del modelo nace un molde de caucho de silicona del que se extrae el modelo de yeso de la fundición. A partir de este modelo, en la fundición, se realiza el molde de metal en el que, durante la fase de producción, se inyecta el material plástico líquido, aprovechando las máquinas de entintado. A continuación, cada figura se decora a mano en los distintos acabados que exige el mercado y el gusto de los decoradores.

El final del ciclo de producción consiste en un estricto control de calidad, para eliminar cualquier imperfección, y por tanto en el embalaje. En nuestra fábrica también realizamos casetas y accesorios en madera, corcho y musgo. Nacen fuentes, fuegos en funcionamiento, figuras en movimiento que permiten, sobre todo a los niños, ambientar las figuras en un entorno evocador que recuerda los colores y las características de los maravillosos paisajes italianos.

En las frías tardes de invierno que preceden a la Navidad, es bonito compartir con nuestros hijos la historia del nacimiento de Jesús escuchando música navideña con el agua que fluye, el fuego que arde, los artesanos que trabajan y la sagrada familia que domina el conjunto, recreando ese espíritu familiar que está en la base del significado del belén. Se acerca la Navidad y con ella las numerosas celebraciones que conmemoran, con alegría y solemnidad, el nacimiento de Jesús. El 30 de noviembre, la Custodia de Tierra Santa celebró el regreso de una reliquia de la Santa Cuna del Niño Jesús a Belén.

Esta reliquia, conservada inicialmente en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma, forma parte de uno de los fragmentos de madera que la tradición señala como pertenecientes a la cuna de Jesús. La madera sagrada se colocó en un relicario en forma de cuna, hecho de cristal y coronado por el Niño Jesús recostado sobre un suelo de paja dorada, realizado por el arquitecto italiano Giuseppe Valadier en 1797 como regalo de la duquesa María Emanuela Pignatelli, duquesa de Villahermosa. Para el

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